Memoria

Parte de los trabajos que he realizado en el ámbito de la cultura han sido en proyectos llevados a cabo por la empresa Magma Servicios Culturales. Esta empresa, mantiene a día de hoy un contrato de colaboración con la Obra Social Fundación la Caixa, aportando el personal especializado para sus exposiciones itinerantes.


Fotografía de la exposición "Europa Fue Camino: La Peregrinación a Santiago en la Edad Media". Esta exposición, de carácter histórico-artístico, pasó por la ciudad de Córdoba en el invierno de 2009. Generalmente las "carpas" suelen ubicarse en los espacios más céntricos y transitados de las ciudades. Su ubicación, unido a la calidad del contenido expositivo y la posibilidad de realizar visitas guiadas y concertadas para grupos, suele favorecer que el índice de visitantes sea muy elevado, llegando a rozar en esta ocasión los 1.000 visitantes diarios de media. El público suele ser heterogéneo tanto en edades, nacionalidades o nivel formativo. Por tanto, la versatilidad y la capacidad de adaptación de los contenidos en las visitas guiadas y las concertadas son fundamentales.

Museo Casa Ibáñez. Olula del Río
Otro de los proyectos que llevé a cabo con esta empresa fue la elaboración de un censo de todos los museos, de titularidad pública o privada, y de las colecciones museográficas en Andalucía. El proyecto se realizó mediante visitas personales a los centros, entrevista con los directores o responsables de las entidades y recogida de material gráfico e informativo de cada uno. La intención del proyecto, encargado por la Junta de Andalucía, era volcar toda la información recogida en una base de datos que pudiera consultarse online. Mi responsabilidad consistió precisamente en realizar durante varios meses estas visitas y el análisis de los establecimientos. Este proyecto fue muy interesante y pude conocer de primera mano museos y colecciones de multitud de temáticas, sus fondos, los planes museológicos y museográficos.


En 2010 el Ayuntamiento de La Rambla solicitó la elaboración del inventario y catalogación de los bienes y obras de arte existentes en la Casa Museo de Alfonso Ariza. Mi primera labor fue diseñar la base de datos que fuera compatible con Domus, para introducir posteriormente los datos recogidos. Luego se estableció un plan de trabajo para digitalizar y catalogar los más de 1.500 dibujos, 1035 esculturas en "terra-cota", metal y madera, casi 800 piezas de cerámica tradicional, 903 pinturas y numeroso mobiliario. También se inventarió y catalogó una biblioteca personal que el artista tenía en su casa. La labor fue ardua, ya que el almacenamiento de las obras, fundamentalmente los dibujos y las esculturas de pequeño y mediano tamaño, no era el ideal.

Hay que decir, que entre el patrimonio catalogado en el museo, se encontraron obras de otros artistas, fruto de donaciones o resultado de la adquisición por parte del Ayuntamiento de La Rambla mediante concursos y exposiciones. El volumen total de las obras forzó que el plazo para la finalización del proyecto se extendiera ligeramente más de lo previsto. Finalmente, se presentó el inventario completo, la memoria de actividad y la base de datos para la consulta de los fondos actuales y para la introducción de futuras adquisiciones. También se entregaron las recomendaciones para el almacenamiento adecuado de las obras, desarrollo del recorrido expositivo, accesibilidad y diseño de paneles y cartelas.


Quería incluir en este recorrido gráfico, las primeras experiencias profesionales de actuación sobre el Patrimonio.
La siguiente fotografía corresponde a los trabajos de restauración que llevé a cabo como parte del Curso de Restauración del Patrimonio Religioso, organizado por la Universidad de Córdoba.
Las intervenciones se centraron en la restauración de doce cuadros y un retablo ubicados en la Parroquia de San Andrés, Córdoba. A mí se me asignó este cuadro, datado en el primer cuarto del siglo XVII, que representa al Apóstol Santiago. La autoría es anónima, aunque se atribuye al cordobés Juan de Peñalosa, así como los otros once Apóstoles también ubicados en el Altar Mayor de la iglesia. Peñalosa pintó  para esta misma parroquia "La imposición de la casulla a San Ildefonso", temática que repetiría para uno de los altares de la Catedral de Astorga.
El cuadro de Santiago, presentaba craquelado del pigmento y el oscurecimiento general de la obra, producto de las capas de barniz aplicadas en anteriores restauraciones. Además había numerosas "lagunas" sobre todo en la figura y parte del fondo del cuadro. Después de varias semanas de trabajo, se concluyó la retirada del barniz oscurecido, la estabilización del craquelado y el relleno de las lagunas, siempre bajo la directrices de la Técnico Responsable y siguiendo los protocolos establecidos para la restauración de obras pictóricas. Se recuperaron el brillo y colorido originales.

Para finalizar con esta memoria de actividades gráfica, os dejo tres fotografías de el proceso de exhumación de los restos humanos de la I.A.U Avda. Cervantes, 22 en Córdoba, llevada a cabo por la empresa Arqueobética. El resultado de esta intervención mostró que bajo el subsuelo del solar, existió una pequeña necrópolis romana con horno crematorio, en la que los individuos eran dispuestos "Decúbito supino" (en extensión boca arriba) y cubiertos por grandes "tegulae" (tejas) rectangulares. Como anécdota en esta excavación, decir que las fotografías de detalle pertenecen a un individuo masculino, de entre 25-30 años tras su análisis antropológico, en el que se halló un moneda a la altura de la primera vértebra cervical, C1. Este hecho se debe al desplazamiento de la moneda desde su ubicación incial, en boca, hacia atrás por el paso del tiempo. El hallázgo documentaría una práctica funeraria romana, en la que tras la muerte del individuo, y siguiendo la mitología griega, Caronte conducía en su barca al fallecido hacía el inframundo y esta moneda u óbolo serviría para pagar al barquero.
La moneda puede indicarnos que el individuo pertenecía a una familia de posición acomodada. No se documentó hallazgo similar en ningún otro individuo y no era algo habitual entre personas de escasos recursos. A ellos, Caronte les hacía esperar en el Más Allá hasta decidir cruzarles sin tributo.